domingo, 31 de mayo de 2009

La Iglesia Católica ordenó ayer a doce nuevos sacerdotes

CINCO DE LOS NUEVOS PADRES SON DOMINICANOS Y SIETE DE DIVERSOS Y LEJANOS PAÍSES
Ceremonia. Seis de los sacerdotes rendidos al pie del Altar, como parte de su ceremonia de consagración.

Santo Domingo.- En una ceremonia que reafirmó la universalidad de la Iglesia Católica, el arzobispo de Santo Domingo, Nicolás de Jesús Cardenal López Rodríguez, ordenó ayer sacerdotes a doce jóvenes que realizaron estudios en el Seminario Redemptoris Master, que dirige la comunidad de Los Catecúmenos en el sector Los Ríos, del Distrito Nacional.

El cardenal López Rodríguez destacó las cualidades y la preparación de los nuevos sacerdotes, con edades entre los 24 y 32 años. Destacó la respuesta al llamado de Dios que dieron estos jóvenes, que ayer empezaron a vivir su vida sacerdotal.

Los exhortó a ser fieles al Evangelio de Jesucristo y a su iglesia, viviendo una vida de auténticos cristianos. Les pidió que sean los apóstoles que necesita el mundo de hoy, muchas veces lleno de facilismos y desamor. Del grupo, cinco son dominicanos, un haitiano, un ecuatoriano, un colombiano, un español, un nicaragu¨ense, y los otros dos de países tan distantes como Brasil y Polonia.

La cantidad de sacerdotes que se han ordenado y se ordenarán este año en la República Dominicana alcanza el número 40, una cifra que nunca se había registrado en la historia de la Iglesia Católica en el país.

En la ceremonia, que duró unas dos horas y fue celebrada en la Catedral de Santo Domingo, estaban presentes familiares y amigos de los doce jóvenes que vinieron desde sus respectivos países a presenciar la ordenación de sus parientes que ya eran diáconos transitorios.

Cientos de personas asistieron a la celebración, pero no pudieron entrar todos a la Catedral.

Había grupos en la puerta principal y en las entradas laterales, mientras una gran muchedumbre veía las ordenaciones a través de una pantalla gigante colocada bajo dos enormes carpas en la Plazoleta de los Curas.

Los nuevos sacerdotes son los dominicanos Enrique Rodríguez González, Carlos Andres Pérez Hiciano, Ariel Rodríguez Méndez y Ramón López Guzmán, de Santo Domingo, y Tulio Napoleón Matos, de Barahona.

Además, Douglas Sabala, de Nicaragua; Crisanto García Díaz, de España; Gonzalo Díaz Herrera, de Colombia; Jackek Rico, de Polonia; Edvaldo Da Rocha, de Bra sil: Galo Gonzalo Japón, de Ecuador, y Geffrard Vileus, de Haití. Todos celebrarán su primera misa hoy domingo en las distintas comunidades parroquiales a las que pertenecen.

El Papa: "Todavía no entiendo por qué el señor me ha escogido"

Exhorta a los jóvenes a ser solidarios
Benedicto XVI

CIUDAD DEL VATICANO.- Benedicto XVI aseguró hoy que "nunca" pensó que un día sería Papa y agregó: "Todavía no consigo entender por qué el Señor me ha escogido para este ministerio, pero lo acepto, aunque se trataba de algo sorprendente que iba más allá de mis fuerzas. Pero el Señor me ayuda".

El Pontífice, que hoy visitó la Misión Pontificia de la Infancia, respondió así a la pregunta sobre si esperaba convertirse en Papa cuando era pequeño formulada por uno de los niños que asistieron al encuentro, .

Joseph Ratzinger explicó que fue "un chico bastante ingenuo en un pequeño pueblo de provincia, situado lejos de las grandes ciudades" y relató cómo había transcurrido su infancia junto a su hermano mayor Georg, que tiene ahora 84 años.

"Había algunos ricos y otros menos. Nosotros habíamos llegado hacía poco (a Traunstein, en Baviera) con nuestros padres, aunque los otros chicos nos acogieron bien",recordó Benedicto XVI.

Asimismo, reconoció que en alguna ocasión había discutido con los otros chicos y afirmó: "Lo importante es reconciliarse después sin dejar amargura en el alma".

"Con nuestros compañeros recorrimos nuestro camino. Todos éramos católicos y esto fue una gran ayuda. Aprendimos juntos el catecismo y nos preparamos para recibir la primera comunión, que fue un día espléndido", agregó.

El Papa Ratzinger propuso además a todos los jóvenes asistentes al encuentro, llegados de toda Italia y de otros países, una reflexión: "escuchar, rezar, conocer, y compartir la solidaridad".

Además, el Pontífice señaló que es importante buscar ayuda en la oración y precisó que el día debe comenzar con un rezo y acabar con otra plegaria, a la vez que insistió en la importancia de "compartir y no desear las cosas sólo para uno mismo".

La Iglesia Católica ordenó ayer a doce nuevos sacerdotes

CINCO DE LOS NUEVOS PADRES SON DOMINICANOS Y SIETE DE DIVERSOS Y LEJANOS PAÍSES
Ceremonia. Seis de los sacerdotes rendidos al pie del Altar, como parte de su ceremonia de consagración.

Santo Domingo.- En una ceremonia que reafirmó la universalidad de la Iglesia Católica, el arzobispo de Santo Domingo, Nicolás de Jesús Cardenal López Rodríguez, ordenó ayer sacerdotes a doce jóvenes que realizaron estudios en el Seminario Redemptoris Master, que dirige la comunidad de Los Catecúmenos en el sector Los Ríos, del Distrito Nacional.

El cardenal López Rodríguez destacó las cualidades y la preparación de los nuevos sacerdotes, con edades entre los 24 y 32 años. Destacó la respuesta al llamado de Dios que dieron estos jóvenes, que ayer empezaron a vivir su vida sacerdotal.

Los exhortó a ser fieles al Evangelio de Jesucristo y a su iglesia, viviendo una vida de auténticos cristianos. Les pidió que sean los apóstoles que necesita el mundo de hoy, muchas veces lleno de facilismos y desamor. Del grupo, cinco son dominicanos, un haitiano, un ecuatoriano, un colombiano, un español, un nicaragu¨ense, y los otros dos de países tan distantes como Brasil y Polonia.

La cantidad de sacerdotes que se han ordenado y se ordenarán este año en la República Dominicana alcanza el número 40, una cifra que nunca se había registrado en la historia de la Iglesia Católica en el país.

En la ceremonia, que duró unas dos horas y fue celebrada en la Catedral de Santo Domingo, estaban presentes familiares y amigos de los doce jóvenes que vinieron desde sus respectivos países a presenciar la ordenación de sus parientes que ya eran diáconos transitorios.

Cientos de personas asistieron a la celebración, pero no pudieron entrar todos a la Catedral.

Había grupos en la puerta principal y en las entradas laterales, mientras una gran muchedumbre veía las ordenaciones a través de una pantalla gigante colocada bajo dos enormes carpas en la Plazoleta de los Curas.

Los nuevos sacerdotes son los dominicanos Enrique Rodríguez González, Carlos Andres Pérez Hiciano, Ariel Rodríguez Méndez y Ramón López Guzmán, de Santo Domingo, y Tulio Napoleón Matos, de Barahona.

Además, Douglas Sabala, de Nicaragua; Crisanto García Díaz, de España; Gonzalo Díaz Herrera, de Colombia; Jackek Rico, de Polonia; Edvaldo Da Rocha, de Bra sil: Galo Gonzalo Japón, de Ecuador, y Geffrard Vileus, de Haití. Todos celebrarán su primera misa hoy domingo en las distintas comunidades parroquiales a las que pertenecen.

miércoles, 27 de mayo de 2009

Iglesia dice que enfrentará a quien sea por defensa de la vida

EL CARDENAL ADVIERTE QUE ESTE MUNDO NO SE ARREGLA MATANDO GENTE Y ABORTANDO NIÑOS
Reflexión. Nicolás de Jesús López Rodríguez consideró que cuando los gobernantes se dedican a hacer leyes inicuas y perversas se convierten en leyes nulas.

Santo Domingo.- El cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez afirmó que la Iglesia Católica no cederá ni un ápice en su defensa del derecho a la vida y enfrentará todas las presiones que sean necesarias para que se mantenga la penalización del aborto en el sistema legal dominicano. “No es matando gente, ni abortando niños, como se va a arreglar el mundo, y esto hay que decírselo al Gobierno, al Congreso y a todo el mundo”, enfatizó .

El prelado dijo que la Iglesia se mantendrá alerta y sus pastores no descansarán, ya que enfrentarán a quien sea para que el Congreso haga las cosas bien hechas y se mantenga lo que se tiene que mantener, a pesar de las muchas presiones que se están haciendo. Agregó que para la Iglesia defender la vida está fundamentada en la Palabra de Dios y que es un mandato de Jesucristo cuando envió a sus disípulos a predicar.

“Lo que estoy diciendo y nuestra posición es consecuencia de la predicación del Evangelio”, añadió. Hablando en el programa Fe y Acontecer, que produce en el Canal Televida, junto al periodista Miguel Franjul, el Cardenal recordó que la Iglesia ha proclamado siempre que la obligación del que gobierna es someterse a lo que Dios manda, pero el grave error y el desconcierto de los últimos siglos es que los gobernantes se creen más grandes y soberanos de lo que realmente son, y se olvidan de que el único grande es Dios.

Consideró que cuando los gobernantes se dedican a hacer leyes inicuas y perversas se convierten en leyes nulas porque no pueden obligar a nadie, aunque las voten y aprueben todos los parlamentos del mundo.

Legislación
“Las leyes inicuas, por consiguiente, son nulas, según dice Santo Tomás de Aquino”, precisó López Rodríguez, al tiempo que reiteró que ninguna ley inicua, mala, perversa, puede obligar a nadie en conciencia, aunque esté votada con la autoridad parlamentaria, “y tremendo que la gente no se dé cuenta de la importancia que esto tiene, porque hay una confabulación mundial para evitar el nacimiento de los pobres”, dijo.

Agregó que el aborto se está tomando como un pretexto y como un recurso antivida para que no sigan naciendo niños, porque las campañas anticonceptivas que vienen haciendo las grandes naciones desde hace 30 ó 40 años no han dado los resultados que se deseaban. “Eso ha agravado la cosa, porque ellos creen que matando gente es como van a arreglar el mundo”, precisó.

El arzobispo de Santo Domingo indicó que la línea de la Casa Blanca con el señor Obama, del Pentágono y las Naciones Unidas, y de otras gentes confabuladas es el aborto, cercenar el derecho a la vida que tienen los niños de nacer.

“Pero nosotros nos mantedremos alertas, no descansaremos, ni vamos a ceder un ápice”, respondió el Cardenal.

SECTORES BUSCAN CREAR CONFUSIÓN
La semana pasada, en una carta enviada a la Asamblea Revisora de la Constitución, los obispos católicos denunciaron que en el país hay sectores que pretenden imponer en la nueva Constitución de la República el Plan Global de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) de Control Demográfico.

Señalaron que al no poder utilizar directamente la palabra “aborto”, estos grupos juegan a la semántica con términos como “igualdad de género”, “derechos sexuales y reproductivos” y “perspectiva de género”, y pidieron a los asambleístas que no se dejen presionar y que mantengan el apoyo al artículo 30, que establece que la vida es inviolable desde la concepción hasta la muerte. La carta fue entregada al presidente de la Asamblea Revisora, Reinaldo Pared Pérez, a través del obispo auxiliar Pablo Cedano y el sacerdote Manuel Ruiz. “Sabemos que están sometidos a muchas presiones nacionales e internacionales que les tildan de atrasados, oportunistas, politiqueros, doble moral, entre otros calificativos, de quienes no aceptan el carácter sagrado de su investidura”, precisa la carta de los obispos.

“Estamos convencidos de que hemos avanzado y de que ustedes han votado por una constitución moderna, humanista y respetuosa de los derechos humanos”.

lunes, 25 de mayo de 2009

PAPA RECHAZA LA VIOLENCIA


Cassino.- El papa Benedicto XVI pidió “rechazar toda forma de violencia para construir la paz”, ayer domingo en Cassino (centro), sitio estratégico donde muchos soldados aliados y alemanes murieron durante la Segunda Guerra Mundial.

La basílica del monasterio de Monte Cassino, un edificio “reconstruido después del gran desastre del segundo conflicto mundial”, se “eleva como una advertencia silenciosa para rechazar el uso de toda forma de violencia para construir la paz: en las familias, las comunidades, los pueblos y en la humanidad toda”, dijo el Papa al celebrar allí la ceremonia.

La abadía fue reconstruida luego de su destrucción en mayo de 1944 durante los bombardeos estadounidenses para apoyar la ofensiva terrestre de los aliados, que buscaban desalojar a los alemanes de ese punto clave en el camino hacia Roma.

La abadía resultó afectada por la violencia de la guerra, pero “salió más vigorosa”, afirmó el Papa, que, antes de suceder a Juan Pablo II, vino en varias ocasiones a este monasterio donde está enterrado San Benedicto, fundador de la orden de los benedictinos.

sábado, 23 de mayo de 2009

EL DESIGNIO DE DIOS SOBRE LA VIDA FAMILIAR



Designio de Dios sobre el matrimonio y la familia
Llamados al amor verdadero

El hombre es llamado al amor, a imagen de Dios quien es Amor. En cuanto espíritu encarnado, es decir, alma que se expresa en el cuerpo informado por un espíritu inmortal, el hombre es llamado al amor en esta su totalidad unificada. El amor abarca también el cuerpo humano y el cuerpo se hace partícipe del amor espiritual.

En consecuencia, la sexualidad, mediante la cual el hombre y la mujer se dan uno a otro con los actos propios y exclusivos de los esposos, no es algo puramente biológico, sino que afecta al núcleo íntimo de la persona humana. Ella se realiza de modo verdaderamente humano, solamente cuando es parte integral del amor con el que el hombre y la mujer se comprometen totalmente entre sí hasta la muerte.

Imagen del Amor de Dios

La comunión de amor entre Dios y los hombres encuentra una significativa expresión en la alianza esponsal (o sea de esposos) que se establece entre el hombre y la mujer.

Su vínculo de amor se convierte en imagen y símbolo de la Alianza que une a Dios con su pueblo. El pecado que puede atentar contra el pacto conyugal se convierte en imagen de la infidelidad del pueblo a su Dios. Pero la infidelidad del pueblo no destruye la fidelidad eterna del Señor, y por tanto el Amor siempre fiel de Dios se pone como ejemplo de las relaciones de amor fiel que deben existir entre los esposos.

Representación de la unión de Cristo y su Iglesia

El Espíritu que infunde el Señor renueva el corazón y hace al hombre y a la mujer capaces de amarse como Cristo nos ama.

Su recíproca pertenencia es representación real, mediante el signo sacramental, de la misma relación de Cristo con la Iglesia.

Amor - don reciproco y don de la vida

Según el designio de Dios, el matrimonio es el fundamento de la comunidad más amplia de la familia, ya que la institución misma del matrimonio y el amor conyugal están ordenados a la procreación y educación de los hijos.

En su realidad más profunda, el amor es esencialmente don; y el amor conyugal, a la vez que conduce a los esposos al recíproco “conocimiento” que los hace “una sola carne” (ver Gén. 2,24), no se agota dentro de la pareja, ya que los hace capaces de la máxima donación posible, por la cual se convierten en cooperadores de Dios en el don de la vida a una nueva persona humana. De este modo los cónyuges, a la vez que se dan entre sí, dan más allá de sí mismos la realidad del hijo, reflejo viviente de su amor, signo permanente de la unidad conyugal y síntesis viva e inseparable del padre y de la madre.

Al hacerse padres, los esposos reciben de Dios el don de una nueva responsabilidad. Su amor paterno está llamado a ser para los hijos el signo visible del Amor mismo de Dios.

Introducción en la comunidad humana y en la Iglesia

En el matrimonio y en la familia se constituye un conjunto de relaciones interpersonales - relación conyugal, paternidad - maternidad, filiación, fraternidad - mediante las cuales toda persona humana queda introducida en la “familia humana” y en la “familia de Dios” , que es la Iglesia.

El matrimonio y la familia cristiana edifican la Iglesia; en efecto, dentro de la familia la persona humana no sólo es engendrada y progresivamente introducida, mediante la educación, en la comunidad humana, sino que mediante la regeneración por el bautismo y la educación en la fe, es introducida también en la Iglesia.

Formar una comunidad de personas

- Sin el amor, la familia no puede vivir, crecer y perfeccionar como comunidad de personas.

- En virtud del pacto de amor conyugal, el hombre y la mujer están llamados a crecer continuamente en su comunión a través de la fidelidad cotidiana a la promesa matrimonial de la recíproca donación total.

Esta comunión conyugal hunde sus raíces en el complemento natural que existe entre el hombre y la mujer y se alimenta mediante la voluntad personal de los esposos de compartir todo su proyecto de vida, lo que tienen y lo que son.

En Cristo Señor, Dios confirma esta comunión, la purifica y la eleva conduciéndola a perfección con el sacramento del matrimonio: el Espíritu Santo infundido en la celebración sacramental ofrece a los esposos cristianos el don de una comunión nueva de amor, que es imagen viva y real de la singularísima unidad que hace de la Iglesia el indivisible Cuerpo místico del Señor Jesús.

El don del Espíritu Santo es mandamiento de vida para los esposos cristianos y al mismo tiempo impulso estimulante, a fin de que cada día progresen hacia una unión cada vez más rica entre ellos, a todos los niveles - del cuerpo, del carácter, del corazón, de la inteligencia y voluntad, del alma - revelando así a la Iglesia y al mundo la nueva comunión de amor, donada por la gracia de Cristo.

- La comunión conyugal se caracteriza no sólo por su unidad sino también por su indisolubilidad: Esta unión íntima en cuanto donación mutua de dos personas, lo mismo que el bien de los hijos, exigen la plena fidelidad de los cónyuges y reclaman su indisoluble unidad.

La indisolubilidad del matrimonio halla su verdad última en que Dios quiere y da la indisolubilidad como fruto, signo y exigencia del Amor absolutamente fiel que Dios tiene al hombre y que el Señor Jesús vive hacia su Iglesia.
Cristo renueva el designio primitivo que el Creador ha inscrito en el corazón del hombre y de la mujer, y en la celebración del sacramento del matrimonio ofrece un “corazón nuevo” : de este modo los cónyuges no solo pueden superar la “dureza del corazón” (Mt. 19,8), sino que también y principalmente pueden compartir el Amor pleno y definitivo de Cristo, quien ha establecido con nosotros una nueva y eterna Alianza.

El don del sacramento es al mismo tiempo vocación y mandamiento para los esposos cristianos, para que permanezcan siempre fieles entre sí, por encima de toda prueba y dificultad, en generosa obediencia a la santa voluntad del Señor: “lo que Dios ha unido, no lo separe el hombre” (Mt. 19,6).


(S.S. Juan Pablo II)

miércoles, 13 de mayo de 2009

Palabra Diaria ::Miercoles 13-05-2009


Con Una perspectiva nueva de mi mundo, comienzo de nuevo en la vida.

''Volver a empezar''

Un cambio en mi vida sólo puede motivarme a hacer modificaciones simples, pero otro cambio puede llevarme a una transformación increíble.

Son esos cambios de transformación, los que quizás me hacen sentir que vuelvo a empezar. Y está bien, porque un nuevo comienzo guarda la promesa de mi mayor bien. Considero cada día una excelente oportunidad para tener una perspectiva nueva en mi mundo. Tal vez ande por mi cuenta o me reúna con otros miembros de una familia nueva. Tal vez comience una carrera o quizás la cambie. Sin importar la situación o el momento de ésta, Dios es mi compañero constante, y con Dios, siempre progreso.

“Por tanto, nosotros todos, mirando con el rostro descubierto y reflejando como en un espejo la gloria del Señor, somos transformados de gloria en gloria en su misma imagen, por la acción del Espíritu del Señor.”—2 Corintios 3:18

Nuestros jóvenes, realidad y desafío


Es claro que la realidad de los jóvenes es mucho más compleja de lo que a veces pensamos. Por ser una realidad diferente y en permanente cambio, es necesario que en nuestras iglesias locales enfoquemos cuidadosamente este ministerio y que podamos proveerles líderes idóneos y pastorearles de manera tal que puedan conocer al Señor y caminar con él, siendo sal y luz en nuestros países.

Tensión entre la iglesia y el mundo

Es una realidad que los jóvenes de nuestras iglesias viven en dos esferas totalmente diferentes: la sociedad —el mundo, como es denominado en la jerga evangélica— y la iglesia. Estas dos esferas no sólo son diferentes una de la otra, sino que en cierta forma, cada vez más, son radicalmente opuestas y viven en creciente conflicto.

Por un lado, la juventud evangélica está acostumbrada a ser expuesta dentro de la iglesia a toda una serie de valores, prioridades, formas de ver la vida que constituyen lo que podemos denominar la cosmovisión judeo-cristiana. Durante siglos, estos valores han sido los que sustentaron y estructuraron la cultura y la sociedad occidental. Incluso, aunque las personas no fueran creyentes participaban de estos valores, ya que los mismos constituían el consenso cultural sobre el que se construía la sociedad, y ésta los utilizaba para regirse.

Inseguridad y confusión con relación a la experiencia de conversión

Hay una realidad sociológica que no podemos ni debemos ignorar. En nuestras congregaciones hay un número creciente de personas que son segunda e incluso tercera generación de evangélicos. Se trata de muchachos y muchachas que, por decirlo de alguna manera, no vienen directamente del mundo, no provienen de un ambiente no cristiano o secular, sino que se incorporan a nuestras iglesias porque sus padres se convirtieron y ellos han nacido en un contexto evangélico.

Cuando aumenta el número de hijos de creyentes en nuestras iglesias comienza la deserción de estos hijos.

El proceso, incluso se ve agravado por la existencia de una tercera generación de evangélicos, hijos de los hijos de aquellos que una vez abandonaron el mundo.

Falta de relevancia de la Palabra de Dios

Entre nuestros jóvenes se están dando dos lamentables realidades. En primer lugar, desconocimiento de las Escrituras.

En segundo, escaso interés por conocerlas aplicarlas en su vida cotidiana. Los evangélicos eran conocidos en el pasado como elzpueblo de la Biblia, pero esto ha dejado de ser una realidad con las nuevas generaciones. Los jóvenes leen poco la Palabra de Dios y, como consecuencia, no la conocen y, como consecuencia, desconocen al Dios revelado en las Escrituras.

Falta de atención a las necesidades de los jóvenes

Como pastor de jóvenes, domingo tras domingo me siento en los bancos de mi iglesia para el culto dominical. En teoría es la gran celebración de la fe. Es el tiempo cuando toda la familia cristiana, niños, adolescentes, jóvenes y adultos se reúnen para adorar al Señor y celebrar la nueva vida que tenemos en Cristo. La perspectiva es bella, toda la familia reunida para una fiesta.

Sin embargo, cuando el servicio comienza las cosas cambian y la ilusión, desgraciadamente, con demasiada frecuencia, puede dar paso a la decepción. El culto está pensado por y para los adultos de la iglesia. Las necesidades, e incluso, las posibilidades de participación de otros sectores de la familia de la fe no se han tenido en cuenta.

No cantamos canciones infantiles, tampoco explicamos las cosas a un nivel que permita a los niños comprender qué pasa. Los sermones nunca están hechos al estilo que agrada a los adolescentes.

Ausencia de metas, desafíos y delegación de responsabilidades

Hay congregaciones en las que los jóvenes nunca reciben responsabilidades que sean significativas. Se da el triste círculo vicioso: los jóvenes no son, a juicio de los adultos, lo suficientemente maduros para delegarles responsabilidades y desafortunadamente, nadie crece a menos que se le permita desarrollar responsabilidad, lo cual, implica la posibilidad fallar.

El crecimiento surge cuando se asumen responsabilidades. Estas responsabilidades, para que generen crecimiento, han de ser significativas, importantes, han de ser auténticos retos para el joven, que le exijan dar lo mejor de sí mismo y lo lleven a la dependencia del Señor.

Ausencia de personas preparadas para el trabajo con jóvenes

Durante mucho tiempo la disponibilidad y/o la buena voluntad ha sido, si no la única, al menos la principal exigencia para trabajar con los jóvenes. Se daba el caso, de que aquel muchacho o muchacha que más despuntaba recibía la carga y responsabilidad de la dirección del grupo de jóvenes de la iglesia local. Sin embargo, todos nosotros sabemos que ni la buena voluntad ni la disponibilidad implican necesariamente capacidad para llevar a cabo semejante tarea.

Herencia de modelos y métodos del pasado

Los modelos y los métodos nacen para satisfacer necesidades específicas en situaciones muy particulares. Un modelo o un método nace en un contexto con la finalidad de dar respuesta a las necesidades que ese mismo contexto plantea. Por definición los modelos y los métodos son culturales y no necesariamente adaptables de una situación a otra. Además, con el paso del tiempo, estos modelos que nacieron para afrontar circunstancias o necesidades muy concretas, se vuelven obsoletos, entre otras razones por la propia dinámica de la vida. Esta es cambiable por definición, por tanto, lo que ayer servía para dar respuesta a las necesidades de ayer, no necesariamente es válido hoy para dar respuesta a los retos y los desafíos que hoy nos plantea el entorno social en el que se mueven los jóvenes de nuestras iglesias.

Deficiencias en la educación familiar

Existe una realidad creciente en muchas de nuestras iglesias: muchos padres se desentienden de la educación espiritual de sus hijos, delegándola cada vez más a la iglesia. Los padres dan por sentado que la comunidad se encargará de la transmisión de los valores cristianos y que para ello desarrollará las estructuras necesarias.

Sin embargo, la responsabilidad de educar en la fe le corresponde primero a los padres, y no a la comunidad cristiana. No estamos diciendo que la iglesia local no deba proveer formación espiritual para los niños y los jóvenes. ¡En absoluto! Estamos afirmando que esta educación corresponde en primer término a los padres y, tan sólo, en un segundo término a la iglesia. Esta última ha de ser colaboradora en la formación espiritual de los niños y jóvenes, pero nunca debe ocupar el papel y la responsabilidad prioritaria de los padres puesta por la Palabra de Dios sobre ellos.

Modelos de referencia débiles

Los estudiosos de la personalidad humana, afirman que durante la adolescencia y la juventud temprana, la tarea vital y de mayor envergadura que han de asumir las personas es la formación de su propia identidad.

Los muchachos y las muchachas quieren formar una identidad propia, quieren saber quiénes son ellos, cuál es el propósito y el sentido de su vida. Ya no quieren ser identificados con referencia a su familia, quieren ser ellos mismos, ya no más el hijo de tal o la hija de cual.

Premisas equivocadas en relación con el trabajo entre los jóvenes

Las premisas equivocadas llevan, de forma ineludible, a conclusiones erróneas. En muchas iglesias el trabajo con la juventud está edificado sobre dos premisas que a nuestro juicio no son correctas, y que no obstante, determinan el tipo de ministerio que se lleva a cabo.

La primera de las premisas, es que «son todos los que están». Expresado de otro modo, damos por sentado que todos o la mayoría de los jóvenes que asisten a la iglesia o están relacionados con ella son creyentes, nacidos de nuevo y que tienen una relación personal con Dios. Nada más lejos de la realidad, especialmente si estamos trabajando con un grupo en el que la mayoría de sus integrantes son hijos de creyentes de primera, segunda o, incluso de tercera generación.

Conclusión:

Es claro que la realidad de los jóvenes es mucho más compleja de lo que a veces pensamos. Por ser una realidad diferente y en permanente cambio, es necesario que en nuestras iglesias locales enfoquemos cuidadosamente este ministerio y que podamos proveerles líderes idóneos y pastorearles de manera tal que puedan conocer al Señor y caminar con él, siendo sal y luz en nuestros países. Oremos y actuemos para que cumplamos este precioso llamado del que dijo pastorea mis corderos.


martes, 12 de mayo de 2009

LAS CINCO VERDADES DEL EVANGELIO



De la Teología del Evangelio Completo se basa en los Cinco Evangelios. Los Cinco Evangelios se refiere al Evangelio de Regeneración (volviendo a nacer de nuevo), el Evangelio de la Llenura del Espíritu Santo, el Evangelio de la Sanidad Divina, el Evangelio de la Bendiciones, y el Evangelio del Advenimiento. Los Cinco Evangelios representa a los cinco importantes elementos de la Biblia. Los cinco Evangelios trata sobre el comienzo, la progresión y el resultado de la Teología Cristiana y representa el centro de la fuente de fe de todos los cristianos.

. El Evangelio de Regeneración
El primer pilar de Cinco Evangelio es el del Evangelio de Regeneración. El de volver a nacer es un requisito previo a la salvación (San Juan 3:3). De modo que el Evangelio de Regeneración se puede también llamar el Evangelio de Salvación.

1. El Camino de Regeneración

Para que el hombre sea libre de la maldición del pecado, del juicio final, y del dominio de Satanás, el hombre primeramente deberá tener la salvación. Por la rebelión de un solo hombre, Adán, toda la humanidad está destinado a nacer en pecado (Romanos 5:16), y están destituidos de la gloria de Dios y no lo pueden alcanzarlo por su propios medios. (Romanos 3:23)

Inmediatamente después que Adán cometió pecado, Dios profetizo un plan de salvación.

"Y pondré enemistad entre ti y la mujer, y entre tu simiente y la simiente suya; ésta te herirá en la cabeza, y tú le herirás en el calcañar" Génesis 3:15

En este pasaje la simiente de la mujer se refiere a Jesucristo, como también muchos profetas luego profetizaron de él. Como fue profetizado, Jesucristo llegó a ser un sacrificio vivo por la salvación de toda la humanidad. La salvación que fue posible por el padecimiento y la muerte de Jesús en la cruz tiene cuatro significados. Primero, el sufrimiento y la muerte en la cruz señalan al hombre, cuál es el resultado del pecado (Isaías 53:5) Segundo, muestra al hombre de cuán grande es el amor de Dios hacia la humanidad (Romanos 5:8) Tercero, enseña al hombre el verdadero valor de cada hombre (San Mateo 16:26) Cuarto, muestra al hombre el costo de la reconciliación (Isaías 53:6)

2. El Método de la Regeneración

Hay dos condiciones para la regeneración, son el arrepentimiento y la fe. El arrepentimiento y la fe son uno solo e iguales como ellos se manifiestan simultáneamente, así se puede decir que son la cara de una moneda. La primera palabra hablada por Juan el Bautista fue "Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado" (Mateo 3:2) hizo eco con Jesús que dijo "Arrepentíos y creed en el evangelio" (Marcos 1:15) Después de haber sido llenos del Espíritu Santo, también Pedro clamó diciendo "Arrepentíos para que sean borrados vuestros pecados" (Hechos 2:38, 3:19)

La otra condición es la fe. Así como Pablo testificó a los guardas de la prisión en Filipos diciéndole "Cree en el Señor Jesucristo, y serás salvo, tú y tu casa"? (Hechos 16:31). Esta fe de salvación nos es otorgado por Dios y se basa sobre el fundamento de nuestra fe en la promesa de Dios. Es el Espíritu Santo que llegó sobre nosotros que hace posible tener fe en Cristo Jesús como nuestro salvador (I Corintios 12:3)

3. El Resultado de la Regeneración

Cuando nosotros nos damos cuenta de nuestros pecados, y nos arrepentimos con la aceptación de Jesucristo como nuestro salvador, qué resultado traerá nuestro arrepentimiento? Primero, El Espíritu Santo, nuestro consolador, vendrá dentro de nosotros y residirá en nosotros (Romanos 8:11)

Segundo, seremos emancipados de las leyes del pecado y de la muerte (Romanos 8:1,2)Tercero, recibiremos el poder de ser hijos de Dios (Juan 1:12)Cuarto, gozaremos de la gran bendición que Dios ha preparado para nosotros (III Juan 1:2)


Los Diez mandamientos de la Ley de Dios en la Santa Iglesia Católica

Los 10 mandamientos son:

  1. Amar a Dios sobre todas las cosas.
  2. No tomar el Nombre de Dios en vano .
  3. Santificar las fiestas .
  4. Honrar al padre y a la madre .
  5. No matar .
  6. No cometer actos impuros.
  7. No robar.
  8. No decir falso testimonio ni mentir .
  9. No consentir pensamientos ni deseos impuros
  10. No codiciar los bienes ajenos.


1° Mandamiento: Amar a Dios sobre todas las cosas.
Debemos amar a Dios como lo hizo y hace Jesús, porque Dios es nuestro padre que en todo busca nuestro bien. (Mc 12,29). " Este es el más grande y el primer mandamiento " (Mt 22, 37).

A) Deberes que nos impone este mandamiento:
La devoción: Es la prontitud de la voluntad para entregarse a Dios y a sus cosas. La devoción a los santos no termina en ellos sino en Dios.
La oración: Es la elevación de la mente y el corazón a Dios para alabarlos y pedirle lo que conviene a nuestra salvación.
La adoración: Por ella reconocemos la grandeza de Dios y nuestra pequeñez, sometiéndole nuestra voluntad. La adoración debe expresarce externamente mediante actos específicos. Ej.: sacrificios, genuflexión, etc. El culto de adoración solo se ofrece a Dios (latría).
El sacrificio: Es el acto más excelente con que se puede honrar a Dios.

B) Lo que esta prohibido por este mandamiento:
El odio a Dios: Es un pecado satánico, consiste en la aversión a Dios. El mayor pecado que se puede cometer.
La acidia: Tedio, fastidio o pereza de las cosas espirituales por razón del trabajo y molestia que ocasiona.
El amor desordenado de las criaturas: Preferir las criaturas en lugar de su creador o cumplimiento de su voluntad divina.
El culto indebido: Rendir culto pero no como lo manda la Iglesia.
La idolatría: Pecado grave por el cual se tributa a una criatura la adoración que sólo corresponde a Dios.
La adivinación: Es la pretensión de adivinar el futuro por medios indebidos.
La superstición: Es tributar un culto indebido a Dios, o un culto divino a persona o cosa no divina
El sacrilegio: Es la profanación de algo sagrado.
La simonía: Es el intento de comprar algo espiritual.

2° Mandamiento: No tomar el Santo Nombre de Dios en vano.
"de la abundancia del corazón habla la boca" (Mt. 12,34).
A) Lo que permite este mandamiento:
La alabanza a Dios: Expresión externa de nuestro amor interno a Dios.
El voto: Promesa hecha a Dios de un bien mejor.
El juramento: Es la invocación de Dios en testimonio de verdad.
B) Lo que prohibe:
El uso del nombre de Dios en vano: Pronunciar sin motivo o si el debido respeto el santo nombre de Dios, la Sma. Virgen o los santos.
La blasfemia: Consiste en injuriar a Dios, la virgen o los santos. Es un pecado grave.
El perjurio: Es jurar en falso poniendo a Dios por testigo.

3° Mandamiento: Santificar las fiestas.
Los que creemos en la resurrección de Jesús, celebramos con alegría el Domingo y fiestas de guardar.

4° Mandamiento: Honrar al Padre y la Madre.
(Ecle 7,30 y 3,9); (Hechos 5,29); Ecle 3,18). Debemos respetar y amar al prójimo y en especial a los padres.
Porque si es importante el 1° mandamiento "amaras al señor con todo tu corazón, el 2° es semejante al 1°: "amarás a tu prójimo como a ti mismo" (MT 22,39).
Amor al prójimo
a) Motivos:
1- Cristo así lo mando (Jn 13,34).
2- Porque el prójimo refleja la bondad de Dios: "al prójimo se lo ama con amor de caridad porque en él está Dios o para que lo esté".
3- Porque Cristo esta en el prójimo.
4- Porque somos hijos de un mismo padre, por lo tanto, hermanos entre nosotros.
5- Porque tenemos un mismo destino eterno.
b) Distintivos del amor cristiano:
1- Amor a los pobres: (Salmo 41,2); (Mt 25,40); (Jn 3,17); (Mt 25,41-46); (Ecle 3,33); (Lc 13,33); (Tob 4,7); (Lc 14, 12-14).
2- Amor a los pecadores: para que se arrepientan, en ellos esta:
p; Su naturaleza humana, buena es sí misma y digna de nuestro amor.
p; El pecado, que lo hace enemigo de Dios y debe ser objeto de nuestro odio.
3- Amor a los enemigos: (Lc 6,27-28). No los amamos por ser malos sino a pesar de serlo; no con amor sensible sino sobrenatural (por su conversión).
c) Pecados que se oponen directamente al amor al prójimo:
1- El odio: "El que odia a su hermano es un homicida" (1 Jn 3,15); (1 Jn 2,11); (Lev. 19,17)
2- La envidia: Es el pecado por el cual se considera el bien del prójimo como un mal para sí, temiendo ser superado o igualado por los demás (Gál. 5,21)
3- La discordia: Es la desunión de las voluntades en lo referente al bien de Dios y del prójimo (Prov. 6,19)
4- La contienda: Es la discusión violenta con palabras (2 Tim. 2,14)
5- El escándalo: Consiste en decir o hacer algo que induzca al prójimo a pecar (MT 18,6).

5° Mandamiento: No matar.
Nos obliga a conservar la propia vida, y a evitar el suicidio, propia mutilación, dar muerte a otra persona injustamente. También prohibe el duelo.
Es lícito matar en los siguientes casos:
a) Defensa propia.
b) A un animal por orden de la autoridad publica o para alimento.
c) Cuando se combate en guerra justa. Condiciones para que la guerra sea "justa":
1- Si es necesario para que una nación defienda sus derechos en materia grave.
2- Si se recurre a ella en último extremo.
3- Si se lleva a cabo según los dictados de las leyes naturales e internacionales.
4- Si se suspende tan pronto como la nación opresora ofrece la debida satisfacción.
Son pecado:
El aborto: Homicidio triplemente calificado por matar a un ser totalmente inocente, indefenso y sin bautismo (privándolo así de la gloria).
Suicidio: Darse muerte a sí mismo deliberadamente; La vida no es nuestra sino de Dios, somos solo administradores de ella.
Embriagues: Un pecado contra la salud
Eutanasia: Matar al enfermo incurable para acabar con sus sufrimientos. Nunca se puede elegir un medio malo para conseguir un bien bueno.
Mutilación innecesaria: Es el caso de la esterilización.
Maldecir: Pedir para sí o para otro algún mal grave.
Odio, escándalo y mal ejemplo: Es un pecado mayor porque mato el alma cada vez que mis palabras o acciones incitan a otro a pecado mortal. No basta con confesarce, debe reparar el mal que ha hecho rehaciendo los daños producidos, retractándose y dando buen ejemplo.

6° y 9° Mandamiento: No cometer actos impuros y No desear la mujer del prójimo.
Se nos manda ser puros de pensamiento, palabra y acción. (1 Cor. 6,12-20). En el 6° se prohiben los actos y en el 9° los pensamientos y deseos.
Consejos para practicar la pureza:
1) Rezar, frecuentar los sacramentos y tener una gran devoción a la Sma. Virgen.
2) Huir de las ocasiones de pecado y rechazar las tentaciones.
3) Mortificar el cuerpo haciendo que se acostumbre a obedecer al alma.

Dios nos dio el "sexo" para trasmitir la vida e hizo que sea con placer; pero buscar este placer, por puro placer, fuera del matrimonio o en el pero impidiendo artificialmente la transmisión de la vida es pecado grave.
En esta materia no solo se peca con las malas acciones sino también consintiendo a los malos pensamientos o deseos, miradas, tocamientos, lecturas, etc.

7° y 10° Mandamiento: No robar y No codiciar los bienes ajenos.
Estamos obligados a dar a cada cual lo que de derecho le corresponde. Todos tienen derecho a disponer de las cosas propias aunque sin olvidar su función social. El 7° prohibe toda injusticia externa y el 10° toda injusticia interna.
Se prohibe:
El hurto o robo.
La compra de cosas robadas.
El fraude o engaño en el comercio (peso, calidad, precio, etc.)
La rapiña: Cuando los patrones no pagan al obrero el justo salario.
Los obreros que no han cumplido su trabajo y exigen la paga completa.
La usura.
El no pagar las deudas.
El acaparamiento (Prov. 11,26).

El que ha robado o dañado al prójimo en sus bienes si puede, debe restituir y resarcir los perjuicios causados.

8° Mandamiento: No levantar falso testimonio ni mentir.
(Efesios 4,15 y 4,25)
Se prohibe:
La mentira (Éxodo 23,7)
La simulación, que es la función con el fin de causar un juicio erróneo.
La hipocresía: Una bondad fingida.
La difamación: Quitar fama al prójimo ausente.
La calumnia: El imputar al prójimo una acción mala no cometida por él.
El juicio temerario: Creer sin motivo suficiente que el prójimo está en pecado o tiene mala intención.
La murmuración: El sembrar cizaña entre los amigos.
El falso testimonio: Afirmando algo falso o negando la verdad.
La burla: poniendo al prójimo en ridículo delante de los demás.
La maldición
La violación de un secreto.


Genesis Capitulo 1


Genesis Capitulo 1.

1 En el principio creó Dios los cielos y la tierra. 2 Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas.

3 Y dijo Dios: Sea la luz; y fue la luz. 4 Y vio Dios que la luz era buena; y separó Dios la luz de las tinieblas. 5 Y llamó Dios a la luz Día, y a las tinieblas llamó Noche. Y fue la tarde y la mañana un día.

6 Luego dijo Dios: Haya expansión en medio de las aguas, y separe las aguas de las aguas. 7 E hizo Dios la expansión, y separó las aguas que estaban debajo de la expansión, de las aguas que estaban sobre la expansión. Y fue así. 8 Y llamó Dios a la expansión Cielos. Y fue la tarde y la mañana el día segundo.

9 Dijo también Dios: Júntense las aguas que están debajo de los cielos en un lugar, y descúbrase lo seco. Y fue así. 10 Y llamó Dios a lo seco Tierra, y a la reunión de las aguas llamó Mares. Y vio Dios que era bueno. 11 Después dijo Dios: Produzca la tierra hierba verde, hierba que dé semilla; árbol de fruto que dé fruto según su género, que su semilla esté en él, sobre la tierra. Y fue así. 12 Produjo, pues, la tierra hierba verde, hierba que da semilla según su naturaleza, y árbol que da fruto, cuya semilla está en él, según su género. Y vio Dios que era bueno. 13 Y fue la tarde y la mañana el día tercero.

14 Dijo luego Dios: Haya lumbreras en la expansión de los cielos para separar el día de la noche; y sirvan de señales para las estaciones, para días y años, 15 y sean por lumbreras en la expansión de los cielos para alumbrar sobre la tierra. Y fue así. 16 E hizo Dios las dos grandes lumbreras; la lumbrera mayor para que señorease en el día, y la lumbrera menor para que señorease en la noche; hizo también las estrellas. 17 Y las puso Dios en la expansión de los cielos para alumbrar sobre la tierra, 18 y para señorear en el día y en la noche, y para separar la luz de las tinieblas. Y vio Dios que era bueno. 19 Y fue la tarde y la mañana el día cuarto. 20 Dijo Dios: Produzcan las aguas seres vivientes, y aves que vuelen sobre la tierra, en la abierta expansión de los cielos. 21 Y creó Dios los grandes monstruos marinos, y todo ser viviente que se mueve, que las aguas produjeron según su género, y toda ave alada según su especie. Y vio Dios que era bueno. 22 Y Dios los bendijo, diciendo: Fructificad y multiplicaos, y llenad las aguas en los mares, y multiplíquense las aves en la tierra. 23 Y fue la tarde y la mañana el día quinto.

24 Luego dijo Dios: Produzca la tierra seres vivientes según su género, bestias y serpientes y animales de la tierra según su especie. Y fue así. 25 E hizo Dios animales de la tierra según su género, y ganado según su género, y todo animal que se arrastra sobre la tierra según su especie. Y vio Dios que era bueno.

26 Entonces dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza; y señoree en los peces del mar, en las aves de los cielos, en las bestias, en toda la tierra, y en todo animal que se arrastra sobre la tierra. 27 Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó. 28 Y los bendijo Dios, y les dijo: Fructificad y multiplicaos; llenad la tierra, y sojuzgadla, y señoread en los peces del mar, en las aves de los cielos, y en todas las bestias que se mueven sobre la tierra.

29 Y dijo Dios: He aquí que os he dado toda planta que da semilla, que está sobre toda la tierra, y todo árbol en que hay fruto y que da semilla; os serán para comer. 30 Y a toda bestia de la tierra, y a todas las aves de los cielos, y a todo lo que se arrastra sobre la tierra, en que hay vida, toda planta verde les será para comer. Y fue así. 31 Y vio Dios todo lo que había hecho, y he aquí que era bueno en gran manera. Y fue la tarde y la mañana el día sexto.

lunes, 11 de mayo de 2009

¿Cómo vencer mis depresiones?


Lo que todo joven creyente debe saber acerca de sí mismo.

¿Cómo vencer mis depresiones?

La depresión parece ser la enfermedad de moda hoy. Y parece que no está claro, desde el punto de vista médico, cuáles son sus causas. ¿Qué resortes escondidos gatillan las depresiones? ¿Qué puede hacer que los jóvenes creyentes las sufran?

En los jóvenes las depresiones suelen ser causadas porque se sienten permanentemente en deuda. Quiero decir, sientes que no estás a la altura de lo que los demás esperan de ti. Entonces te "bajoneas". Quisieras ser admirado, pero en cambio, te sientes menospreciado. Te parece que nadie te valora, que nadie reconoce el tesoro que eres tú, o que tienes dentro de ti.

Otras causas de depresión suelen ser la pérdida de algún ser amado, o el hecho de provenir de familias desajustadas. Esto es muy común. La depresión puede llegar a un extremo nocivo para el joven cuando llega a pensar que todo cuanto haga para superar sus problemas será inútil, que no hay esperanza de un mañana mejor.

Bueno, tú sabes que eso no es así. Los que amamos al Señor Jesucristo siempre tenemos esperanza de un mañana mejor. El problema que enfrentas hoy no es más importante que tu vida. Nada que te suceda, por oscuro que lo veas, es más importante que tu vida, la cual está en las manos del Señor. Al contrario, aquello aparentemente malo que te sucede ayudará para que veas la mano de Dios socorriéndote. Los tremendos muros que a veces se alzan delante de ti, y que no te permiten avanzar, y que te deprimen tal vez ya no estén mañana. Y si están, el Señor te dará la fuerza para saltarlos.

La mejor solución es el amor

Creo que la mejor solución para la depresión es el amor: el amor de Cristo y el amor de los hermanos en la iglesia. Puede que no tengas una familia muy ordenada, pero tienes al Señor; puede que no tengas hermanos en tu casa con quienes compartir tus tristezas, pero tienes hermanos en la iglesia que podrán hacerlo. Una persona que se sabe amada tal como es, difícilmente caerá en la depresión.

En la casa de Dios experimentamos el amor del Padre, de su amado Hijo, y de nuestros muchos hermanos. En la casa de Dios el amor no es un eslogan, ni una receta psicológica, sino un pan que se come todos los días.

Algunas consejos prácticos

Sin embargo, en el terreno práctico, hay algunas cosas que debes considerar: Las depresiones suelen producirse porque te has propuesto metas muy altas, a las cuales no has podido llegar pese a tus esfuerzos. Pues bien, tal vez no sea el momento de proponerte esas metas. Te falta madurez hoy, pero mañana podrás lograrlo. Por lo pronto, fíjate metas más realistas. Nadie sube una montaña de una sola vez. Paso tras paso, lenta pero sostenidamente, tú puedes alcanzar las más altas cimas. Muchos de los fracasos de hoy son una preparación para los triunfos del mañana.

La Escritura dice: "Todo lo que te viniere a la mano para hacer, hazlo según tus fuerzas" (Eclesiastés 9:10). Tienes que ver cuáles son tus fuerzas, y no pretender más de lo que puedes hacer por ahora. También enseña la Palabra que no todos hemos recibido cinco talentos, algunos tenemos dos, o uno. Tal vez tú no hayas recibido cinco talentos. Si es así, Dios no te va a pedir cuenta por cinco, sino por los dos que recibiste. Es mejor ser fiel en lo poco que ser infiel en lo mucho.

Otra cosa importante es que tú busques la forma de servir a otros. El Señor enseñó que más bienaventurado era dar que recibir. (Hch. 20:35). Cuando tú das algo, recibes mucho más a cambio: la satisfacción, el gozo de ver que pudiste bendecir a otra persona. Dios se encargará de que tú seas suplido también en tus propias necesidades. En el acto de bendecir está la clave de tu propia bendición; en el acto de dar está la clave de tu propia abundancia.

El Señor dijo: "Y como queréis que hagan los hombres con vosotros, así también haced vosotros con ellos." (Lc. 6:31). Esto significa que, antes que esperar que nos hagan el bien, nosotros hemos de adelantarnos a hacerlo. Lo que quisiéramos recibir, démoslo antes, y el Señor se encargará de que nosotros también lo tengamos.

Algunas veces puede suceder que el problema radique en que hemos cometido alguna falta más o menos grave, y no nos atrevemos a confesarlo. Entonces, se pone un peso en el corazón, y la carga se va haciendo cada vez más grande. Sentimos que Dios no nos va a perdonar, o que la persona a quien hemos ofendido (si es así el caso) tampoco. ¡Qué dilema! Y mientras tanto, nos vamos hundiendo.

¿Qué haremos? Simplemente, ¡confesar! Confesaremos a Dios, y nos acogeremos al poder de la preciosa sangre de Jesucristo. Pediremos fuerzas al Señor, y luego confesaremos a la persona afectada.

Estos son pasos necesarios que hay que dar para conservar la paz en el corazón, y para que las vías de comunión con Dios estén despejadas.

La depresión es una red que el diablo teje en torno a las personas (a veces ayudado por una tendencia natural a la melancolía), pero que el hijo de Dios puede romper gracias a la vida de Cristo que opera en él, y a la vida del Cuerpo, que es la iglesia.

Que el Señor bendiga a todos los jóvenes creyentes, y les dé la gracia de experimentar el poder sanador de su precioso Nombre.

BUSCA DE DIOS Y DE LA IGLESIA QUE ES SU HOGAR... UNETE A LA IGLESIA...

viernes, 8 de mayo de 2009

ACOMPAÑA A JESUS EN SU VIDA DE RESUCITADO. PRIMERA SEMANA DE JUNIO

RVD, ACOMPAÑA A JESUS EN SU VIDA DE RESUCITADO

Un encuentro que me transforma

Centro Fe y Cultura Bellarmino

Del 4 al 10 de junio, 2009 P. José Núñez sj (Chepe)

Tema: El Espíritu Santo entre nosotros: sus dones y acciones



INTRODUCCION: Pongámonos en una actitud reflexiva y contemplativa en la manera de hacer la oración en esta semana. Los dones espirituales se refieren a la forma de actuar del Espíritu Santo.



GRACIA: Pedir la gracia de tener la suficiente libertad para dejarnos llenar de los dones del Espíritu Santo. Pedir vigilancia constante para saber diferenciar bien los dones del Espíritu que nos hacen más comunitario y comprometidos con el Reino de Dios.



JUEVES 4: Texto Bíblico ISAIAS 11, 2-9

Estamos llamados a vivir el don de la sabiduría que consiste en conocer a Dios. Este don nos impulsa a actuar con justicia con los más débiles y pobres. Esta misma lectura nos indica la manera de cómo construir la paz e igualdad. Pidamos al Señor la sabiduría necesaria para que podamos vivir los signos del Reino de Dios entre nosotros.



VIERNES 5: GALATAS 5, 16-26.

Aprendamos a distinguir los frutos del mal espíritu y del buen Espíritu. Pidamos a Dios la gracia de los dones del buen Espíritu para que podamos cosechar la paz, la alergia y la justicia del Reino.



SABADO 6: MATEO 25, 14-30

Pedir al Señor que nos ayude a descubrir los talentos (dones) que tenemos para juntos encontrar la voluntad suya. Todos estamos llenos de dones diferentes que el Señor nos ha dado. Pero, al mismo tiempo, estamos llamados a poner al servicio de los demás lo que el Señor nos dio. Preguntémonos si estamos dando todo lo que hemos recibido como gracia de Dios. Preguntémonos si lo estamos poniendo al servicio del Reino.



DOMINGO 7: EFESIOS 1, 15-9.

Imaginémonos a Pablo escribiendo esta carta para nosotros. Sintamos su deseo de que venga a nosotros el espíritu de sabiduría para que podamos conocer a Cristo nuestro Señor y así conocer su camino. Que este espíritu limpie nuestra mirada y podamos encontrar el llamado de Dios que nos reúne en comunidad y nos organiza.



LUNES 8: ROMANOS 12, 6-8.

Pedirle a Dios la Gracia de poder disfrutar los dones del Espíritu recibidos, poniéndolos al servicio de los demás. Que El nos de la libertad de poder darnos por completo a los otros.



MARTES 9: ORACION DE SAN INGNACIO:



Entreguémonos en las manos de Dios rezando la oración de San Ignacio: “Toma Señor y recibe toda mi libertad, mi memoria, mi entendimiento y toda mi voluntad, todo lo que tengo y poseo. Tu me lo distes, a ti, Señor, lo devuelvo: todo es tuyo, dispón a tu completa voluntad, dame tu amor y tu gracia, que esta me basta”.





MIERCOLES: I CORINTIOS 14, 1-4. 9-17



Como usar los dones espirituales. Pablo prefiere los dones que construyen y mantienen unida la comunidad. El nos inspira hacia el don de la profecía ya que transmite confianza, alegría y la esperanza. Procurar los dones que edifica a la comunidad y tendremos la gracia de Dios en abundancia. Recemos para que todos podamos sacar provecho.

PALABRA DE VIDA

Edith, ciega de nacimiento, vive con otras invidentes en una residencia donde el capellán sufre una parálisis en las piernas y no puede celebrar la misa. Por este motivo quieren quitar a Jesús Eucaristía de la casa. Edith ha recurrido al obispo para que lo deje allí como única luz de sus tinieblas. Ha obtenido el permiso y, además, la aprobación para distribuir ella misma la comunión al capellán y a sus compañeras.

Deseosa de ser útil, Edith ha conseguido que le concedan unas horas en una emisora de radio. Las utiliza para ofrecer lo mejor que tiene: consejos, pensamientos válidos, aclaraciones de tipo moral para ayudar con sus experiencias a los que sufren. Podría contarte otras muchas cosas de Edith... Es ciega pero el sufrimiento la ha iluminado.

¡Cuántos ejemplos más te podría contar! La bondad existe, pero no hace ruido. Edith vive su cristianismo concretamente: sabe que cada uno de nosotros ha recibido dones y los pone al servicio de los demás.

Sí, porque un “don” (o “carisma”, en griego) no se refiere sólo a las gracias con las que Dios enriquece a los que tienen que gobernar la Iglesia. Tampoco se refiere únicamente a esos dones extraordinarios que Él se reserva para enviar directamente a algún fiel, para el bien de todos, cuando considera que hay que poner remedio en la Iglesia a situaciones excepcionales o a peligros graves, para los que no bastan las instituciones eclesiásticas; por ejemplo: la sabiduría, la ciencia, el don de hacer milagros, el de hablar lenguas, el carisma de suscitar una nueva espiritualidad en la Iglesia, y otros.

Por dones o carismas no se entienden sólo éstos, sino también otros más sencillos que muchas personas poseen y que se notan por el bien que hacen. El Espíritu Santo es el que obra.

Además, podemos llamar también dones o carismas a los talentos naturales. Cada uno tiene los suyos. También tú.

¿Cómo tienes que usarlos? Hay que pensar cómo hacerlos fructificar, pues te han sido dados no sólo para ti, sino para el bien de todos.

«Que cada uno ponga al servicio de los demás los dones que haya recibido, como buenos administradores de las diversas gracias de Dios»

La variedad de dones es inmensa. Cada uno tiene el suyo y, por tanto, tiene su función específica en la comunidad.

¿Y qué me dices de ti? ¿Tienes algún título? ¿No has pensado nunca en poner a disposición de los demás algunas horas a la semana para enseñar al que no sabe, o al que no tiene medios para estudiar?

¿Tienes un corazón especialmente generoso? ¿No has pensado nunca en movilizar esas fuerzas que aún quedan sanas en la sociedad, a favor de la gente pobre o marginada, y restablecer en el corazón de muchos el sentido de la dignidad del hombre? […]

¿Tienes cualidades especiales para consolar? ¿O, tal vez, para llevar una casa, para cocinar, para confeccionar con poca cosa ropa útil, o para los trabajos manuales? Mira a tu alrededor para ver quién tiene necesidad de ti.

Siento una gran pena cuando veo que hay unos que buscan y otros que enseñan cómo llenar el tiempo libre. Nosotros cristianos no podemos tener tiempo libre mientras haya en la tierra un enfermo, un hambriento, un encarcelado, un ignorante, uno que tenga dudas, alguien que esté triste, un drogadicto, […] un huérfano, una viuda…

¿Y no te parece también que la oración es un don formidable que debemos usar, ya que en todo momento podemos dirigirnos a Dios que está presente en todas partes? […]

«Que cada uno ponga al servicio de los demás los dones que haya recibido, como buenos administradores de las diversas gracias de Dios»

¿Te imaginas una Iglesia en la que todos los cristianos, desde los niños hasta los adultos, hacen todo lo que pueden para poner a disposición de los demás sus dones?

El amor mutuo adquiriría tal consistencia, tal amplitud y relieve que […] todos podrían reconocer de esto a los discípulos de Cristo. […]

Y entonces, si el resultado es éste, ¿por qué no poner todo de tu parte para conseguirlo?


Chiara Lubich

1) Palabra de vida de enero de 1979, publicada en CHIARA LUBICH, Ser tu Palabra, Madrid 1980, p. 69.


Bendiciones y paz.